Según la sabiduría o
riental, la atracción del alma da lugar a la amistad, la del espíritu – al respeto, y la del cuerpo – al deseo. ¡Y como el resultado de la unión de las tres atracciones surgen el sexo e incluso el amor!
Es poco probable que a una mujer de 40 años le interese tener relación con un jóven de 19 ya que su desarrollo espiritual no coincide.
Los psicólogos estiman que la pareja más firme y feliz es aquella donde el hombre es 3-5 años mayor que la mujer, como máximo 7-10 años. Y si hay relación entre una mujer y un hombre que es mucho más joven, es un indicio de que el hombre necesita el cariño y el apego maternal, como si volviera a intepretar el papel del hijo y la mujer el de la madre. De ahí surge la pregunta si estas relaciones tienen la posibilidad de llegar a ser serias y prolongadas. Hay algunas ventajas en cuanto al sexo y al lado espiritual de la vida que podrían facilitarlo.
Según algunas investigaciones científicas, la sexualidad femenina consigue su auge a los 35-40 años. Y la masculina mucho antes – a los 20-30 años. Por lo tanto, las parejas de este tipo son las que más pueden satisfacer las necesidades de los dos. Además el joven puede aprender mucho de la experiencia de una mujer madura.
Al lado de un amante joven una mujer madura sentirá la necesidad de lucir más joven y atractiva, ya que hay un gran número de chicas por todas partes. La mujer se propone cuidarse más, visitar los centros de belleza, hacer deporte, etc.
Y una ventaja importante más. El instinto sexual es uno de los instintos más fuertes ofrecidos por la naturaleza. A cualquier mujer le hace feliz ser madre, todas sueñan con tener un hijo sano. Los datos estadísticos referentes a los nacimientos en los últimos 20 años señalan una importante tendencia general a retrasar la maternidad hasta después de los 30. Pero con una pareja joven hay más posibilidad de hacer el sueño realidad.
Según se sabe, después de los 24 años en los hombres disminuye la posibilidad de tener bebés sanos. Además los padres maduros tienen más probabilidad de tener hijos con retrasos mentales y defectos físicos. Por lo tanto, si el hombre es más joven, aumenta la probabilidad de dar a luz un bebé sano.