Hace mucho que científicos y médicos de todo el mundo están estudiando los grupos sanguíneos y su impacto en la vida de las personas. Investigaciones recientes han demostrado que el grupo sanguíneo de la mujer ejerce mucha influencia en su fertilidad y sexualidad. Los especialistas han determinado la dependencia entre la capacidad de concebir de forma rápida y el grupo sanguíneo de la mujer.

563 mujeres menores de 45 años que tenían problemas para tener hijos han participado en el experimento. Resulta que los problemas más serios los tenían las mujeres con el grupo I. El índice de fertilidad en estas mujeres es 2 veces más bajo en comparación con las demás, por lo tanto les es más difícil quedar embarazadas. Y todo porque el grupo I sanguíneo afecta a la producción de los óvulos. Casi la mitad de la población del planeta (el 44%) nace con el grupo I sanguíneo. Este grupo es el más difundido. Le sigue el grupo II. Lo tiene el 42% de la gente. Los demás pertenecen a los grupos III y IV.

Los especialistas también han demostrado la influencia del grupo sanguíneo en la emotividad de las mujeres. Así, por ejemplo, las mujeres con el  grupo de sangre I suelen tener un temperamento muy fogoso. Las mujeres con el grupo II son en su mayoría bastante equilibradas. Y las más apasionadas son las que tienen el grupo sanguíneo IV.