Después de entrevistar a mujeres de diferentes edades, los sexólogos han compuesto el ranking de popularidad de los rasgos masculinos que más irritan a las mujeres y les impiden a recibir el placer sexual.
el 34% del número total de las encuestadas se han quejado del egoísmo masculino
el 32% de las mujeres han criticado la búsqueda del punto G
el 29% de las mujeres han expresado su disgusto en cuanto a la interrupción del acto sexual para contestar a llamadas telefónicas o visitar el baño.
el 22% de las mujeres consideran que sus parejas hablan demasiado durante el sexo
al 17% de las mujeres no les gustan las caricias del pecho demasiado duraderas
el 10% de las mujeres están descontentas por un sexo demasiado rápido
el 5% de las mujeres sufren de la rudeza de los hombres en la cama
Qué más les puede sacar a las mujeres de quicio:
La pregunta “¿Te has corrido ya? Incluso si la mujer está a punto de hacerlo, arruina el momento.
La indiferencia y la frialdad. Una relación sexual no sólo se compone del coito, el preámbulo es de suma importancia, pero también, después de una dosis de sexo, es importante lo que pasa después. A muchas mujeres les disgusta terminar y ver que su pareja ya se ha dado la vuelta y empieza roncar, ya que siguen necesitando ternura y cariño.
Las ordenes. ¿De qué placer se trata si la mujer se ve obligada a ser sumisa y obedecer al hombre? Cuando te están dictando todo el rato cómo debes moverte y hacer esto o aquello, quedarás más que insatisfecha.
Los calcetines. Dejarte los calcetines puestos para tener sexo (o cualquier otra prenda que no sea sexy), es una muestra de que no tienes mucho interés. No seas perezoso y cuida tu aspecto en la cama.
La tele. Es poco probable que el hombre consiga hacer 2 cosas a la vez con la misma eficacia.
Sentido del humor. No son muchas las mujeres que son capaces de apreciar las bromas durante el sexo.