Durante años los científicos han estado investigando una de las “manchas negras” de la ginecología, la llamada esterilidad convencional. La mujer está sana, su pareja también, pero no consiguen concebir un hijo. Los científicos han investigado 200 parejas con síntomas similares.
Resulta que la razón era esta. Dado que la flora vaginal es favorable para el esperma, los espermatozoides tienen un alto nivel de “supervivencia”. El espermatozoide más vivo fecunda al óvulo. Los demás son asimilados por el organismo femenino. Es así por naturaleza.
El sexo oral es una actividad sexual inventada por el ser humano y no por la naturaleza. El esperma es una proteína ajena para la cavidad bucal. Después del contacto oral las células defensoras se activan para proteger el organismo contra las células ajenas y estos anticuerpos producen inmunidad contra el esperma, igual que contra los microbios. Es más, no tiene importancia si la mujer se trague el semen o no. El resultado de una afición excesiva por el sexo oral es que tanto en la flora de la cavidad bucal como en la de la vagina se produce la inmunidad contra el esperma. ¿De qué embarazo se puede hablar en este caso?
Sin embargo, muchas parejas practican el sexo oral y no sufren las consecuencias mencionadas antes. Además, son muchas las parejas que lo practican. Pero como el riesgo de la esterilidad convencional existe, es necesario tener en cuenta que si queréis tener hijos, hace falta tener más cuidado en lo que se refiere a los contactos orales.
25.01.12
13:00
autor: admin