2. La obesidad y los trastornos de salud relacionados es la causa más difundida de disfunciones sexuales, sobre todo en los hombres. Las mujeres, a su vez, tanto obesas como demasiado flacas sufren de los trastornos sexuales en igual medida.
3. La mala alimentación, la falta de vitaminas y de proteínas es un problema muy difundido. Siendo joven la hipersexualidad natural prevalece sobre estos problemas, pero con los años tanto el deseo como las capacidades sexuales se reducen bruscamente debido a la mala alimentación. A pesar de todo, la mayoría de la gente considera esta recesión como un fenómeno natural o encuentra otras explicaciones, acusando a sus parejas.
4. El estrés y la fatiga crónica son los factores más destructivos para la armonía familiar. Las mujeres de los hombres de negocio lo saben perfectamente. Los hombres en la edad más floreciente y más activa que no tienen problemas con la alimentación y las vitaminas, sufren con frecuencia de una apatía sexual debido al estrés y a la fatiga crónicos.
5. Existen también problemas estrictamente sexuales. Para librarse de ellos es necesario en primer lugar enfrentarlos recurriendo a la ayuda de los especialistas. Los problemas sexuales más difundidos de las mujeres son la anorgasmia secundaria (es decir adquirida durante la vida), el vaginismo y la dispareunia (los espasmos y sensaciones dolorosas durante el acto sexual) pueden ser tratados en el 90% de los casos.
6. La eyaculación precoz tan frecuente en los hombres puede ser tratada en el 78-82% de los casos, depende de la forma de la misma. Solamente hace falta saber que es una enfermedad como cualquier otra y si tiene lugar es necesario acudir al médico y no descuidarla.
7. En todo caso los peores enemigos de la salud sexual y la armonía somos nosotros mismos. El hombre que cree haber cumplido con todas sus obligaciones al casarse con su pareja, que no le ayuda ni la apoya, a quien no le importa su aspecto físico y no se pregunta nunca si sigue atrayéndola a su pareja, es capaz de dejar desilusionada a cualquier mujer y hacerla perder el cariño. Las mujeres de temperamento apasionado seguramente empezarán a buscarle sustituto lo más pronto posible.